Queridos Amigos:
En la zona en la cual vivo, el fenómeno de la niebla durante muchos meses afecta el normal funcionamiento de las rutas que solemos recorrer.
Aquí vemos conductores irresponsables y desconocedores de las problemáticas.
Para ellos y para todos unos tips para tener en cuenta:
Una de las primeras reglas de la seguridad al conducir es ver y ser vistos, por eso es tan peligrosa la conducción con niebla. En lo que va de este año, ya hemos sufrido varios accidentes en cadena producidos por esta condición meteorológica, muchos de ellos con resultados trágicos con numerosas muertes y heridos.
Estas son algunas sugerencias para tener en cuenta a la hora de encontrarnos con los temibles bancos de niebla.
Lo primordial y la primera reacción que se debe tener es bajar la velocidad para adaptarla a la visibilidad. Hay una conocida regla que se denomina de las tres V:
Visibilidad=Velocidad=Vehículo delantero.
Es decir, por ejemplo, con una visibilidad de 50 metros lo mejor es circular a 50 km/h y separarse unos 50 metros del vehículo que nos precede.
Encender las luces bajas y, si dispone, las antiniebla. Nunca utilizar las luces largas ni las balizas durante la marcha. La niebla densa produce un efecto espejo, que crea la ilusión óptica de los faros de un vehículo en sentido contrario al nuestro, cuando lo que en realidad se ve son nuestros propios haces de luz reflejados.
Las balizas son solamente para indicar algún peligro o maniobra de detención. Circular con las balizas encendidas, además de confundir al resto de los conductores, molesta por la intermitencia de aquéllas, lo que también produce el efecto espejo.
Nunca se debe frenar bruscamente y siempre hay que evitar sobrepasos. En la marcha es posible que alcancemos a otro vehículo, cuando esto suceda hay que tomarlo como referencia y no intentar pasarlo, ya que es una maniobra muy peligrosa en estas condiciones, porque no se pueden medir las distancias en forma precisa, y tampoco son visibles, hasta que las tenemos muy cerca, las luces de los vehículos que vienen de frente.
Cuando la niebla es muy densa se puede tomar como referencia las marcas viales (líneas blancas) de la derecha de la calzada. Eso debe hacerse en forma intermitente, ya que no se debe sacar definitivamente la vista del frente.
En autopistas y autovías, siempre es mejor circular por el carril derecho. De esta forma, en caso de emergencia, podrá tener una alternativa de escape hacia la banquina y hasta fuera de ésta.
Agudizar el sentido del oído: hay que estar atento al sonido de los vehículos que pueden estar cerca. Lo conveniente en estos casos es bajar las ventanillas, apagar la radio y concentrarse en los sonidos del camino.
Mantener limpios el parabrisas y la luneta: para eso es fundamental encender el aire acondicionado o la calefacción y utilizar el desempañador. Si por algún motivo no tuviéramos, hay que intentar limpiarlos manualmente. Siempre debería hacer esto el acompañante. Si uno viaja solo, siempre hay que repartir la atención entre esta tarea y la vista del camino.
Nunca hay que detenerse en el camino, ni siquiera en la banquina: si no está en condiciones de seguir la marcha, hay que asegurarse de no obstaculizar a los que siguen, por eso hay que tomar la precaución de sacar el vehículo del camino, y la banquina es parte de éste, asfaltada o no.
Un sendero lateral, una estación de servicio o, si es necesario, seguir a campo traviesa hasta un lugar seguro y lo más alejado posible de la ruta. Una vez que detuvo el vehículo, hay que mantener las luces encendidas y poner las balizas para avisar con certeza que está detenido.
Como siempre, la prudencia y una actitud de manejo responsable son los mejores acompañantes
Un abrazo y que les sirva la info.
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